Orgullo

Uno de los enemigos del ser humano: el orgullo. Un sentimiento que nos hace hacernos los fuertes cuando en realidad queremos lo contrario. Las personas así no se rebajan a pedir perdón ni ayuda. ¿Por qué? Por su orgullo. Para mí, es algo que no se debe practicar mucho puesto que hace daño a sí mismo y a los demás. He aprendido muchos ejemplos reales de el orgullo y no se lo aconsejo a nadie. Si hay que utilizarlo, se debe de hacer bien. Las fases posteriores de este sentimiento son la ira, la soberbia, la envidia y la vanidad (también conocido como amor propio) Si estás saliendo con alguien, hay que saber decir YO. Primero tu, antes que tu pareja, porque eres tú la persona que vive, eres tú el que te tienes que cuidar. Algunas personas no entienden esto, sobre todo las personas románticas y amorosas. Me considero romántico y amoroso, pero coño, nadie me va a superar porque yo soy YO y nadie se tiene porque sentir más grande que yo. Los buenos usos del orgullo se pueden identificar en los casos de machismo hacia la mujer. Por ejemplo, la mujer puede decir que ella es mejor que el hombre puesto éste se cree el rey del mundo mientras que a la mujer la trata como a una puta mierda. En resumen, si se utiliza bien el orgullo puede ayudar mucho. En cambio, si se usa sin pensar, se aprenderá la lección con daño propio y hacia los demás.